___Clasificación: Tipos de Cerdos___
Entre tanta basura que se ha escrito sobre la amistad, hay una frase particular que quiero refutar. Aquella que afirma que "los amigos son los que están en las buenas y en las malas". Pura mierda.
Tal vez la dijo algún moralista sensible y quizás una secta de gnomos obedientes adoptó este concepto y le dio un valor supremo, quién sabe.
miércoles, 24 de junio de 2009
Los Verdaderos Amigos Cerdos
sábado, 20 de junio de 2009
Eso no es Amor
___Clasificación: Ideologia del Autor___
Hay que ver cuan absurdo y diferente es el concepto que una persona fomenta sobre una misma acción que se desarrolla en la vida real con respecto a una película romántica.
Imaginen, por ejemplo, el emotivo filme "El Diario de Noah".
Cuando el protagonista de la película decide ir a buscar a su amada a la ciudad adonde ella se mudó, todos dirán que "eso es amor".
Pero si algo parecido sucediera en la vida real, entonces a él lo tratarán de obsesivo y peligroso.
Si el galán del filme le escribe a ella una carta todos los días durante un año, todos coincidirán que "eso es amor".
Sin embargo, si la misma cosa aconteciera en la vida real, de este modo a él lo tacharán de trastornado que necesita tratamiento.
En caso de que la mujer protagonista abandone a su novio con el que se iba a casar para regresar con el amor de su vida y fundirse en una sacudida de sexo, todos afirmarán que "eso es amor".
No obstante, si esta acción se diera en la vida real, pues a ella la calificarán como una verdadera puta.
Si en la película él construye con sus propias manos una casa frente al mar con ventanas azules, tal cual le había pedido su novia, todos sostendrán que "eso es amor".
Pero si semejante caso ocurriera en la vida real, entonces él recibirá el apodo de grandísimo pelotudo gobernado.
Y así podría seguir enunciando cuantiosos ejemplos.
Sería sencillo y vago de mi parte alegar que el origen de tales diferencias radican en la melodía persuasiva que abundan en los filmes para acompañar a las escenas: "piliplurumplum... plumplum", pero más cómodo me resulta aún atribuirle la responsabilidad a ciertas neurosis y perturbaciones que experimentan determinados Cerdos.©
miércoles, 3 de junio de 2009
Los Moralistas Sensibles
___Clasificación: Crónica del Autor___
Otra vez confirmo la presencia de una especie diferente de Cerdos, la otra cara de la moneda, la que da al piso y no se ve, a los que llamaré con cierta ironía como "Moralistas Sensibles".
No existe una sola manera de distinguirlos en pleno apogeo de expansión. Sus características pueden ser algunas de las que nombraré a continuación o, peor aún, todas.
Además de su alto grado de estupidez, son incapaces de aceptar sus errores. Dicen aborrecer las mentiras, aunque cuando ellos mienten argumentan que lo hacen para no lastimar.
Es imposible discutir con ellos, no saben de lógica. Pero juran obrar correctamente y perseguir la justicia - no porque se lo dicte la consciencia, sino por su afán de demostrar una imagen buena de sí mismos -
Pero sobre todas las cosas, jamás los critiques porque se le descompensa el ego y entran en un desequilibrio nervioso.
La anécdota que traigo a colación es sólo un ejemplo pormenor de la irracionalidad de estos espécimen:
Hace unos días me detuve a tomar una tónica en la terraza de un bar. Por desgracia me tocó sentarme cerca de uno de estos moralistas sensibles.
Mientras tanto, por la vereda del establecimiento pasaba caminando un discapacitado, a quien le habían apuntado un brazo, con tanta mala suerte que tropezó y cayó al suelo - sin sufrir lesión -. Algunas personas comenzamos a reír.
Moralista: "me parece increíble que las personas se rían"
Diego: "¿acaso no es de humano reírse de los insignificantes accidentes que pueden parecer graciosos"
Moralista: "sí, pero esta persona que lo padeció es discapacitada"
Diego: "entonces estás discriminando a los discapacitados. Si nos reímos de alguien "capacitado"¿Por qué no podemos reírnos de un discapacitado?"
Moralista: "justamente, por su discapacidad"
Diego: "el tropezón no tuvo nada que ver con su discapacidad. En este caso no nos reímos de sus falencias, sino del tropezón". Ese hombre es manco, no rengo"
Moralista: "bueno, bueno, sea como sea, no se deben reír de los accidentes ajenos"
Diego: "antes me contestaste que es humano reírse de esos accidentes, por lo tanto, vos no sos humano"
Moralista: "soy más humano que vos"
Diego: "entonces te estás contradiciendo como loco"
Es como digo, estos insensatos rozan los límites de la ridiculez.©